Illinois is experiencing a surge in whooping cough cases, coinciding with a summer increase in COVID-19, according to health officials. As students head back to school, the rise in infections has prompted a renewed alert across the state.
Whooping cough, also known as pertussis, is a highly contagious respiratory disease that spreads through airborne droplets from person to person. The Centers for Disease Control and Prevention (CDC) report that cases of pertussis, which had been unusually low during the pandemic, are now returning to pre-pandemic levels.
Nationwide, the incidence of whooping cough has more than tripled from 2023 to 2024. In Illinois, CDC data indicates a significant increase, with 818 cases reported as of August 17, 2024, compared to just 123 cases at the same time last year.
The CDC suggests that the rise in cases could be attributed to the relaxation of pandemic-related preventative measures such as good hygiene and social distancing, which likely reduced transmission of the disease in previous years. The agency notes that the number of whooping cough cases reported this year is approaching levels similar to those seen in 2019, before the pandemic, when more than 10,000 cases were typically reported annually.
Whooping cough symptoms usually start with a mild cough and runny nose, progressing over one to two weeks into severe coughing fits that can last for weeks or even months. These coughing spells are often marked by a distinctive “whooping” sound as the person struggles to breathe. Fever is generally mild, if present at all. The severity of symptoms can vary depending on age and vaccination status, but antibiotics can help reduce both the intensity of symptoms and the spread of the infection.
Health officials are emphasizing the importance of vaccination, particularly for pregnant women and individuals who have close contact with infants. Newborns are at the highest risk of severe complications from whooping cough, as they are too young to receive the full vaccination series.
To protect against pertussis, the CDC recommends the following TDaP (tetanus, diphtheria, and acellular pertussis) vaccination schedule:
- Pregnant women should receive a TDaP booster early in their third trimester during each pregnancy to protect their newborns.
- Young children need five doses of the TDaP vaccine by the time they enter kindergarten: at 2 months, 4 months, 6 months, 15 to 18 months, and 4 to 6 years.
- The first TDaP booster is recommended at age 11. All students entering seventh grade must show proof of a whooping cough booster immunization.
- Adults 19 years of age and older who have not received a TDaP vaccine as teenagers should get one dose.
- After receiving the initial vaccine, adults should opt for a TDaP shot instead of the standard tetanus booster every 10 years to maintain protection against pertussis.
With the school year underway, Illinois residents are encouraged to stay vigilant and up to date with vaccinations to help prevent the spread of whooping cough.
Illinois está experimentando un aumento en los casos de tos ferina, que coincide con un aumento de COVID-19 en el verano, según los funcionarios de salud. A medida que los estudiantes regresan a la escuela, el aumento de las infecciones ha provocado una alerta renovada en todo el estado.
La tos ferina, también conocida como pertussis, es una enfermedad respiratoria altamente contagiosa que se propaga a través de gotitas en el aire de persona a persona. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) informan que los casos de pertussis, que habían sido inusualmente bajos durante la pandemia, ahora están volviendo a los niveles previos a la pandemia.
A nivel nacional, la incidencia de tos ferina se ha más que triplicado entre 2023 y 2024. En Illinois, los datos de los CDC indican un aumento significativo, con 818 casos notificados al 17 de agosto de 2024, en comparación con solo 123 casos en la misma época el año pasado.
Los CDC sugieren que el aumento de casos podría atribuirse a la relajación de las medidas preventivas relacionadas con la pandemia, como la buena higiene y el distanciamiento social, que probablemente redujeron la transmisión de la enfermedad en años anteriores. La agencia señala que la cantidad de casos de tos ferina reportados este año se está acercando a niveles similares a los observados en 2019, antes de la pandemia, cuando se reportaban más de 10,000 casos por año.
Los síntomas de la tos ferina generalmente comienzan con una tos leve y secreción nasal, que progresa en una o dos semanas hasta convertirse en ataques de tos severos que pueden durar semanas o incluso meses. Estos ataques de tos suelen estar marcados por un sonido distintivo de “silbido” mientras la persona lucha por respirar. La fiebre generalmente es leve, si es que está presente. La gravedad de los síntomas puede variar según la edad y el estado de vacunación, pero los antibióticos pueden ayudar a reducir tanto la intensidad de los síntomas como la propagación de la infección.
Los funcionarios de salud están enfatizando la importancia de la vacunación, en particular para las mujeres embarazadas y las personas que tienen contacto cercano con bebés. Los recién nacidos corren el mayor riesgo de complicaciones graves por tos ferina, ya que son demasiado pequeños para recibir la serie completa de vacunas.
Para protegerse contra la tos ferina, los CDC recomiendan el siguiente calendario de vacunación contra el tétanos, la difteria y la tos ferina acelular (TDaP):
Las mujeres embarazadas deben recibir una dosis de refuerzo de la vacuna TDaP a principios del tercer trimestre de cada embarazo para proteger a sus recién nacidos.
Los niños pequeños necesitan cinco dosis de la vacuna TDaP antes de entrar al jardín de infantes: a los 2 meses, a los 4 meses, a los 6 meses, a los 15 a 18 meses y a los 4 a 6 años.
La primera dosis de refuerzo de la vacuna TDaP se recomienda a los 11 años. Todos los estudiantes que entran al séptimo grado deben mostrar prueba de una dosis de refuerzo de la vacuna contra la tos ferina.
Los adultos de 19 años o más que no hayan recibido una vacuna TDaP cuando eran adolescentes deben recibir una dosis.
Después de recibir la vacuna inicial, los adultos deben optar por una dosis de la vacuna TDaP en lugar de la dosis de refuerzo estándar contra el tétanos cada 10 años para mantener la protección contra la tos ferina.
Con el año escolar en marcha, se anima a los residentes de Illinois a mantenerse atentos y al día con las vacunas para ayudar a prevenir la propagación de la tos ferina.